Wednesday, August 5, 2009

Reflexiones Sobre El Maleconazo

El 5 de agosto de 2009 Miami Florida:

El escritor de este articulo regreso del trabajo y recibió noticias de una revuelta en Cuba. Parecía inevitable la revuelta debido al periodo especial y los eventos del remolcador 13 de Marzo. Incluso un experto en la materia de revueltas hablo de la posibilidad de “fenómeno social en Cuba”.

Las noticias sobre el Malecon fue transmitido mediante las cadenas Univisión, Telemundo, y el Canal Sur. El escritor decidió que los noticieros no fueron suficientes y saco su receptor de onda corta para más información. Escucho información de la BBC, Radio Nederlands, Deutsche Welle, La Voz de Rusia, y Radio Nacional de Armenia.

El sintió la sangre hervir en las arterias pues era cubano de sangre y alma. El quedo con las emisiones de Radio Nacional de Armenia en el idioma de Cervantes. Incluso, comenzó escribir un informe de recepción a la emisora de Armenia con una plegaria para ayudar y/o mostrar solidaridad con Cuba y la Comunidad Cubana en el exterior.

Las emisiones de Radio Nacional de Armenia mostro claramente la perdida de control del Malecón por las fuerzas de castrismo aunque sea por cinco minutos. Se podía palpar a un pueblo clamándose por la libertad en medio de una indiferencia mundial. Quizás algunos estaban en los conceptos antiguos de la Guerra Fría como todo un buey de la izquierda/derecha antigua.

Cuando termino los acontecimientos, hubo un sentido de desconcierto. El escritor siguió escribiendo a Armenia.

El 27 de Agosto de 1994 Miami Florida:

El escritor envió su carta para Armenia en el buzón. Parece que se había olvidado de la situación.

El 30 de Septiembre 2009 Ereván, Armenia

Radio Nacional de Armenia respondió a la carta del humilde escritor. He aquí la respuesta:

Respetado Señor:

Contestamos su atenta carta del 27-8-1994 le aclaramos que estamos al tanto de lo que acontece en la hermosa Cuba. Aceptamos su mano de amistad y le alárganos la nuestra.

Radio Nacional de Armenia

El escritor es el autor de esta reflexión y este eternamente agradecido a la República de Armenia y Radio Nacional de Armenia por este gesto bondadoso.